Respetar los tiempos

Lamentablemente en México tenemos una mala reputación en cuanto a llegar temprano a las citas: muchas personas tienen la mala costumbre de llegar tarde a una cita o a un compromiso.

¿Te ha pasado que cuando te invitan a una fiesta o a algún tipo de celebración, la hora a la que te indican que llegues, es en realidad media hora o una hora antes de que en realidad comience todo?

Este tipo de cosas suceden porque desgraciadamente hay una mala costumbre que se tiene con muchas personas: no llegar a tiempo a ese tipo de compromisos. Hay una infinidad de razones:

• El tráfico.

• Las citas previas.

• Los inconvenientes fuera de nuestro control.

• Y un largo etcétera…

Lo cierto es que, quitando los imponderables que a todo mundo nos pueden pasar, en la mayoría de los casos el retraso al llegar no es debido a algo fortuito, sino a una serie de sucesos que se fueron acumulando a lo largo del día, y que hemos normalizado.

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¿No te ha pasado que al llegar a la cita con el médico, debes hacer antesala entre treinta minutos y una hora y media por lo menos para ser atendido?

Muchas veces esto sucede porque la primer cita estaba programada a las 4pm por ejemplo, el doctor llega a las 4:30pm y comienza a esa hora a atender. Desde luego, a partir de ahí, todas las citas estarán retrasadas…. Y si además, con cada paciente dura diez o quince minutos adicionales, este tiempo repercute en las siguientes personas que están haciendo fila.

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Otro ejemplo:

¿Te ha sucedido que tienes una junta en tu trabajo pactada a cierta hora, y si llegas a tiempo, lo normal es que esperen a los que van llegando unos minutos tarde para comenzar?

El clásico: esperemos diez minutos para que los demás lleguen. Y nadie toma a mal esta costumbre, mientras que lo que debería ser preferible es que los que llegaron a tiempo comiencen sin aquellos que no tomaron las precauciones debidas para llegar a la hora acordada con anticipación.

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Esto quizás en el momento no le damos la mayor importancia… para mí, el tiempo es el recurso más valioso ya que es de lo poco que tenemos que no es renovable, y cada minuto debería ser muy preciado por nosotros, tanto para nuestro desempeño en el día como para el tiempo de los demás que estarán también ahí.

¿Aumentarían los buenos resultados si prestáramos atención a este tipo de detalles?

Estoy seguro que sí.

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Tomemos conciencia de lo valioso que es nuestro tiempo así como el tiempo de los demás, y cambiemos esta cultura para convertirnos en una sociedad más respetuosa con los demás. El respeto no sólo se da en la actitud hacia el otro, sino también en la consideración que tenemos hacia sus cosas: sobre todo su tiempo.

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En mi trabajo, el tiempo es fundamental: no nos podemos dar el lujo de entregar un stand ni siquiera unos minutos tarde… ¿te imaginas lo que pasaría si comienza un evento y tu stand aún no está listo? Definitivamente es algo crucial a cuidar por nuestra parte.

Si quieres apoyarte en un empresa que esté consciente de la importancia del tiempo para tí y tu negocio, contáctanos para apoyarte: