¿Qué me ha enseñado el tener y cuidar una mascota?
Hay lecciones muy importantes que podemos aprender al tener una mascota
A mí me gustan los perros… No he tenido muchos, sólo dos cuando vivía con mis papás y otros dos después de esa etapa. Desde mayo del año pasado adopté a un perro que llamamos Spark.
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Es un perro “eléctrico”, porque salió seguramente de la cruza de corriente con corriente, jajajaja.
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Cuando lo adoptamos, tenía alrededor de tres meses de edad, ahora tiene ya más de un año. Es de carácter muy amable, sumamente juguetón y muy veloz… tiene cuerpo parecido al de un galgo, ¡corre como verdadero demonio! No me ha tocado ver algún otro perro más veloz.
He notado que cuando se topa con perros más chicos que él en tamaño normalmente no se lleva tan bien, se lleva mejor con perros de su tamaño o más grandes. Le gusta jugar brusco, correr mucho, dar volteretas con el otro perro y cansarlo lo más posible.
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Mis hijos se divierten mucho con él, lo paseamos casi a diario y ha sido excelente compañía para todos, se convirtió en un miembro más de la familia.
Como cualquier otra mascota, requiere cuidados, mantenerlo limpio, llevarlo con el veterinario, mantener limpio el lugar en el que está en la casa, sacarlo a pasear diariamente, convivir con él.
A cambio de eso, Spark devuelve solamente diversión y agradecimiento. Los perros generalmente son animales muy nobles y agradecidos cuando sus dueños se preocupan porque estén bien.
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La convivencia que tenemos mis hijos y yo con el perro me llevan a reflexionar en cosas que hacemos y que aplican tanto a esa actividad como a la vida profesional:
Confianza: La confianza se gana, y en la vida profesional es muy fácil de perderse. Requiere de un cuidado diario para mantenerse vigente.
Constancia: el cuidado que debemos hacer de nuestros clientes requiere del trabajo diario. Debemos preocuparnos de los intereses de nuestros clientes además de los nuestros. A ellos les interesaremos en la medida en que vean que nosotros estamos interesados por sus necesidades.
Trabajo: el privilegio de colaborar con un cliente no es algo que se consigue de la noche a la mañana, requiere de estrategia y esfuerzo para llegar a tener la oportunidad de ofrecerle nuestro producto o servicio.
Agradecimiento: es muy importante ser agradecidos, tanto con nuestros clientes como con nuestros colaboradores. Los resultados que obtenemos es gracias a las interacciones que tenemos con ambos.
Calidez: el trato con el cliente debe sentirse como cuando tratamos a alguien de nuestra confianza. El cliente debe estar a gusto con nosotros, sintiéndose apoyado en sus necesidades.
Si quieres sentir ese tipo de confianza con nuevos clientes, una excelente forma de acceder a ellos es mediante la participación en exposiciones, congresos y convenciones. Te invito a que acudas con nosotros y te podremos apoyar a hacer de tu evento todo un éxito en tu participación. Ingresa a nuestra página web, déjanos tus datos y te podremos apoyar: