La reciente costumbre de publicar en redes sociales
Actualmente, me he dado cuenta de la importancia que mucha gente le da a estar publicando en redes sociales.
He identificado diferentes motivos que las personas tenemos para estar publicando en las diferentes redes: Twitter, TikTok, Facebook, Instagram, LinkedIn, Snapchat, etc.:
Difusión de nuestros logros.
Dar a conocer en qué eventos estamos, o con quién estamos.
Decir lo que hemos podido adquirir, mostrando fotos o videos.
Compartir en dónde estamos, ya sea en viajes, restaurantes locales, lugares de entretenimiento, entre otros.
Darnos a conocer o posicionarnos como expertos en cierto tema.
Fortalecer nuestra “marca personal” compartiendo gustos y preferencias.
Hablar de nuestros equipos deportivos preferidos.
Comentar de política.
Hablar de preferencias religiosas.
Y en fin, muchos temas más…
Es cierto que tener estas grandes herramientas, actualmente nos ayudan a justamente conectar con personas que quizás de otra manera no podríamos contactar, pero también es cierto que en gran parte, los principales beneficiarios de que se generen tantas publicaciones e información nuestra, son precisamente las compañías dueñas de estas redes sociales.
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Hace unos días vi que en Twitter alguien publicó las “etapas” que sigue una red social a partir de que es creada:
Nacimiento de la red social.
Promoción de la red y crecimiento del alcance entre los primeros usuarios que se registran.
Crecimiento de usuarios, hasta tener una “masa crítica” de buen tamaño.
Limitación del alcance orgánico (es decir, provocado por la misma plataforma) y sustitución de ese alcance por herramientas publicitarias para que los usuarios tengan que pagar para poder llegar a más personas.
Y es justamente en este último punto, en el que la red social, cualquiera que esta sea, obtiene el beneficio de que tanta gente estemos publicando contenido.
Se puede usar todo lo que generamos en beneficio de que los anunciantes al pagar más, puedan llegar a una mayor cantidad de personas.
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Por otra parte, todo el tiempo que invertimos en vertir contenido en nuestras redes, es tiempo que a final de cuentas podría estarnos haciendo falta para otras cosas.
Te pongo un ejemplo que escuché en un podcast hace unos días:
En el programa de Horacio Marchand, (columnista, experto en marketing, empresario y experto en planeación estratégica), estaba platicando con Tutto Assad, una persona de gran experiencia en el mundo de las startups, emprendedor e inversionista.
En un punto de la plática tocaron el tema de las redes sociales, y Tutto dijo que de plano se quedó solamente con una red social: LinkedIn.
En muchas otras (Instagram, Facebook, etc), sí sigue teniendo su usuario, pero de su teléfono las borró para no estar interactuando con ellas durante el día.
Esto lo mencionó para poner énfasis en el tiempo que invertimos en esas plataformas, y todo lo que estamos dejando de hacer o disfrutar por estar metidos en ellas.
Escuché en otra parte que las redes sociales son las nuevas “empresas cigarreras”, que tienen dentro de ellas a las mejores mentes del mundo tratando de hacer lo mejor posible por que nosotros permanezcamos el mayor tiempo utilizándolas, para maximizar la exposición que tendríamos con los anunciantes que ellos promueven.
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Sin satanizar todo lo que hacen, sí es conveniente que reflexionemos en no depender tanto de ellas, y que no nos distraigan de los objetivos en los que cada uno de nosotros nos debemos enfocar.
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En ZEGA, ayudamos a los clientes que se salen de las redes sociales y buscan conexiones personales, para que participen en eventos presenciales como son las exposiciones, y puedan encontrar a esos nuevos prospectos o aliados que los ayudarán a lograr sus objetivos.
Si está en tu interés participar en ellos, déjanos tus datos y te vamos a ayudar a crear esas relaciones significativas posicionando tu marca y la de tu empresa.