Disfrutar de los pequeños placeres de la vida
Ayer tuve la oportunidad de ir con mis hijos al cine.
Normalmente aprovecho una aplicación llamada “Millas para el Retiro” (que por cierto, te recomiendo que la obtengas), en la que tienen un Marketplace con acuerdos con diferentes marcas, una de ellas es la marca CINÉPOLIS, los famosos cines de México con presencia en varios países en el mundo. En ella ofrecen paquetes de compra a precio especial de boletos, y una parte de tu compra se deposita a tu cuenta de la AFORE… a nadie nos cae mal que nos regalen dinero por consumir.
Lo único malo, es que para utilizar los códigos que te envían, uno tiene que hacer la tradicional fila para compra de boletos… una costumbre ya poco usada cuando hay la posibilidad de comprar los boletos desde tu celular para asegurar tu lugar.
Esto no me es mayor problema cuando es una película que ya tiene más de una semana en cartelera, ya que el primer fin de semana de estreno es cuando las salas normalmente se llenan debido a que mucha gente quiere ver la película en cuestión en ese primer fin de semana.
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Decidí llevar a mis hijos al cine porque justamente el jueves se estrenó la película “Spiderman: Un Nuevo Universo”, o por su título en inglés: “Spider-Man: Into the Spiderverse”… ese tipo de películas les gustan mucho y a mí también, así que no lo pensé mucho y decidí irnos los tres al cine para verla.
Me formé en la fila, pensando poder utilizar mis boletos precomprados en la aplicación que te mencioné, y para mi mala fortuna, todos los boletos para ese día, con el tipo de sala que me incluye la precompra, ya estaban ocupados… no había oportunidad de utilizarlos el día de ayer.
Pregunté con el joven que me atendió, y afortunadamente había lugar en una sala de cine especial, con pantalla IMAX, así que le pedí que me vendiera de esos boletos… no pude aprovechar mis boletos precomprados, pero no tuvimos que cambiar de película o de plan para la tarde de ayer.
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Llegó la hora de la función alrededor de una hora después de que compré los boletos, llegamos a la sala de cine y nos sentamos los tres… normalmente me gusta comprar lugares un poco más arriba de la mitad del cine, y en la orilla de la fila… hay más lugar para estirar las piernas ahí, y si por algo tengo necesidad de salir a tomar una llamada o ir al baño, no le estorbaré a nadie al caminar hacia la escalera. (Sí… también acostumbro comprar boletos en zona de pasillo cuando viajo en avión, por las mismas razones que en el cine… para poder levantarme con mayor libertad, y poder estirar un poco más las piernas).
Todavía no comenzaba la función y tuve un “flashback” al pasado: apareció en la pantalla un sombrero y un látigo… seguido de una figura de un hombre mayor visto desde atrás. No había duda: era uno de mis héroes de la infancia.
El trailer era de una película que se estrenará a finales de este mes: “Indiana Jones and the Dial of Destiny”… y digo que tuve ese flashback porque la película de “Indiana Jones y los Cazadores del Arca Perdida”, por mucho tiempo de mi niñez era mi película favorita…
Recuerdo que mi papá alguna vez compró muchos casetes del formato de reproducción de videocasetera BETA que existió en México hace muchos años, y me encantaba poner esa película una, y otra, y otra, y otra vez… Las escenas de acción con el personaje de Indiana Jones peleando contra los soldados nazis eran fascinantes, así como las persecuciones arriba de un caballo o de un tren a toda velocidad.
Yo me imaginaba también montando a toda velocidad en un caballo repartiendo latigazos por todos lados.
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Terminó el trailer y los comerciales, para luego comenzar la película. No te preocupes, no diré spoilers en este escrito en caso de que desees ir a ver la película.
Esta es la segunda película en el formato que están proyectando SONY en colaboración con MARVEL: un formato de caricatura tipo cómic, con gráficos en verdad fenomenales que hacen disfrutar mucho la proyección.
La historia no tiene desperdicio y te hace estar al filo del asiento. Está muy recomendable.
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Al salir del cine, platiqué con mis hijos durante todo el camino de regreso a casa sobre qué les pareció la película, los detalles que observaron durante la proyección, la expectativa que les dejó sobre las historias que vimos, cuáles personajes les parecieron más interesantes o más graciosos, y en fin… mucho de lo que se platica luego de ver una película.
El cine definitivamente es uno de esos pequeños placeres que podemos disfrutar al vivir en una ciudad grande… Me da mucho gusto que después de la pandemia otra vez se pueden ver llenas las salas, con la convivencia que se provoca al salir con tu familia o amigos a disfrutar una buena película.
Sin duda el cine tiene un reto particular por la cantidad de contenido digital que uno puede ver desde su casa, con buenas pantallas y la comodidad del hogar… Pero sin duda, así como los eventos presenciales en comparación con los eventos virtuales, la posibilidad de ir físicamente a participar de manera más directa con ese tipo de experiencias, nunca pasará de moda.
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